Junto a las niñas y adolescentes de la Residencia Bárbara Kast realizamos el programa “Nuestra huerta desde cero”, una iniciativa que buscó sembrar conocimiento, autocuidado y trabajo en equipo a través de la creación de su propia huerta comunitaria.
Durante estos meses compartimos aprendizajes sobre cultivo, compostaje y el valor de cuidar la tierra, pero también sobre colaboración, paciencia y alegría. El resultado fue el reflejo de un proceso lleno de compromiso y cariño.
Dentro del programa construimos dos bancales hechos a medida, sembramos, trasplantamos y cuidamos cada hortaliza que creció.
En esta oportunidad celebramos la cosecha con un cuentacuentas musicalizado y el compartir de alimentos.